Cuando el Conde de Ardwick finalmente decide casarse, pero es rechazado por una belleza ambiciosa con su ojo en el ducado. Entonces la suerte coloca a Lady Lupita Lang en el sendero del Conde, pero Lupita teme por su joven hermanito, que está en peligro de ser un primo despiadado, hasta que el Conde se nombra a sí mismo, tutor del niño, ganando el agradecido amor de Lupita.