Sobre la forma poética

la forma está en tránsito, esto es precisamente lo que ella misma revela.

opina que “poesía es creer que nos llamará por teléfono la chica que vimos ayer en el cine

moverse entre lo incierto y la esperanza, de mojarse con la vida cotidiana, y además apunta a lo imponderable

la poesía, y por lo tanto sus lectores, tiene entre nosotros más años que la Iglesia Católica

en la Edad Media el esfuerzo era tal que los artesanos que elaboraban libros solían comenzar la tarea con invocaciones a la Virgen y concluían dando gracias a Dios y, de paso, pidiendo alguna compensación más próxima, como un vaso de vino

Los rechazos
En primer lugar está el aspecto histórico. Ya hemos recordado que al menos desde el tándem Sócrates/Platón la poesía ha tenido que sortear una cuota de disenso, desprecio e incluso desconfianza. Y, sin embargo, encontró la manera de reproducirse

Durante todo el siglo XIX y parte del XX, muy notoriamente en América Latina, el poeta tuvo una presencia también política,

Lo que sí parece cierto es que el estado emocional de la poesía precede a la palabra: tiene origen anterior a su propia expresión; pero para que exista el poema necesita del lenguaje, con lo que llega naturalmente a la literatura

o que a Platón le molestaba era la capacidad de “mentir” (fabular, imaginar, o fingir como diría Pessoa) que caracteriza a la poesía

no hay artista que no se reserve una zona de cuestionamiento a lo establecido, sea terrenal o celestial. Tampoco hay que descartar la versión de Iris Murdoch cuando sugiere que a Platón le impresionaba (mal) que “los artistas fueran capaces de producir lo que no podían explicar”