«¡No duermas más!:
Macbeth asesina al sueño», el inocente sueño,
el sueño que desenreda el embrollado ovillo
de las preocupaciones, muerte de la vida
de cada día, baño de enconadas penas,
bálsamo del alma herida, dádiva segunda
de la gran Madre, principal manjar
en el festín del mundo.