Honestamente eso de los humanos insectos es poco verosímil dentro del relato, además que queda raro en el universo que construye después.
Me gusta la narrativa de Esquinca, desde sus primeras novelas y sus libros de cuentos, sin embargo, esta primera entrega de La saga Casasola no me pareció que estuviera a la altura de sus otros libros. De cualquier manera había leído Carne de ataúd previamente y puedo decir que mejora mucho. Todo tiene un inicio y si bien éste no está a la altura de otras publicaciones de Esquinca tiene todo lo que nos gusta de él.
Novela negra pero sin detectives. Interesante lectura si te gusta la ficción, la fantasía el terror y algún otro género jalado que se te pueda ocurrir. No ha sido mi novela favorita de este autor pero sigo gozando mucho de su estilo. Me parece claro en su narrativa, es un lenguaje que reconozco como mío, el que siempre he hablado, el de la CDMX.