y terminar así el asilo de cinco años, tres meses y cuatro días, sobre el cual se han escrito numerosos artículos, varios libros y una tesis doctoral en la UNAM (Zavala, 1952). A las 5 de la tarde del 6 de abril de 1954, Haya de la Torre salió de la Embajada de Colombia con destino al aeropuerto de Limatambo para abordar el avión que lo conduciría a México, «expulsado» y despojado de su nacionalidad peruana por un decreto dictatorial49.