El Poder De Seis

Si alguna vez conoces a un hombre que intente ahogar sus penas, infórmale amablemente de que las penas saben nadar.

—Yo también te quiero, Marina. Ya te lo decía, con Héctor Ricardo estás a salvo. Yo cuidaré de ti.

—A ti te gustamos Sarah y yo. Y a mí me gustáis Sam y tú. Acéptalo.

Las respuestas suelen venir cuando menos preguntas te haces.

Las únicas limitaciones de mañana son las dudas de hoy.

La sala es larga y amplia, del tamaño de un campo de fútbol. Un agrio olor a azufre me quema los agujeros de la nariz y me humedece

porque yo no vea a nadie no significa que no me estén viendo a mí

Las únicas limitaciones de mañana son las dudas de hoy.

La clave del cambio está en desprenderse del miedo.

enséñame a un hombre sin vicios y yo te enseñaré a un hombre sin virtudes.