Al principio el libro puede parecer tedioso; sin embargo, a medida que se profundiza en la historia, se vuelve cada vez más interesante, y puede conseguir atrapar al lector. La descripción de los eventos es satisfactoria, si bien es una buena traducción. Acompañando a la historia van los eventos de la retrocesión de Hong Kong en 1997 a la soberanía china, he de decir que el autor lo hace de manera magistral, pues la historia se ve efectivamente inmersa alrededor de este hecho, sin que una devore a la otra, que es la del romance. Si te gusta la novela histórica y, especialmente, Asia oriental, es un libro recomendado.