Sería muy interesante repasar los supuestos del historicismo de la mano de la distinciones heideggerianas Vergangenheit/Gewesenheit, vorhanden/zuhanden (véase infra, capítulo siguiente). El historicismo sostiene la idea de un pasado que está ahí (vorhanden), encerrado en los documentos y a disposición del historiador. Éste sólo levanta el velo de tiempo que lo cubre; así, ese pasado no sería fruto de la acción interpretativa del historiador (zuhanden) sino un ente independiente (vorhanden). Por otra parte, el historicismo se sostiene en una concepción lineal del tiempo que ve el pasado como lo definitivamente ido (Vergangenheit), mientras que en realidad toda la actividad historiográfica se sustenta en el supuesto tácito de la presencia del pasado como esencia de la realidad presente, cognoscible a través de los documentos, pero bien activo en las tres dimensiones de la dura realidad cotidiana del presente.
[47] En 1984 Orwell consiguió cristalizar esa relación en el lema del Partido: «“Who controls the past” ran the Party slogan, “controls the future: who controls the present controls the past”»; George Orwell, Nineteen Eighty-Four, Londres, 1960, p. 31.