El ultrasonido es una herramienta que permite ampliar la exploración física de los pacientes sin exponerlos a radiación y con la facilidad de poder ser llevada hoy en día a la cama del paciente. El conocimiento de los principios físicos básicos y de los fundamentos generales para la manipulación de los equipos de ultrasonido permite que el clínico obtenga las mejores imágenes posibles para el correcto diagnóstico así como también para la realización de intervenciones más seguras.