Cristina Fernández

Pero vaya mandón reguapo.

—Me gusta mirar lo que va a ser mío —

Pues es una verdadera suerte, Alicia. No me gusta la playa.

una empleada modelo que jamás ha llegado tarde, que me he quedado a deshoras para acabar mi trabajo y me he implicado al máximo con los objetivos de la empresa, precisamente hoy no quiero ni puedo retrasarme.

llorando al más puro estilo de Hollywood

Vaya mandón me ha tocado. Pero vaya mandón reguapo.

cago en el gato y en la madre que lo parió, ¡condenado cabrón! ¡Y venga!

qué más quisiera que un tipo así se fijara en alguien como yo.

No puedo evitar pestañear como una muñeca y sonreír al mirarlo.