Amada Traba

Toda relación implica roces y conflictos que precisan ser negociados. Si una de las partes tiene baja autoestima se va a sentir culpable en los conflictos, va a pensar que tiene más responsabilidad en ellos y no va a poder afrontar la negociación en igualdad de condiciones. La culpa se convierte en una poderosa arma de dominación y, debido a la educación, la mayor parte de las mujeres están afectadas por este sentimiento

Este mirar hacia dentro, este cuidarnos, no tiene que ver con el narcisismo del sujeto ególatra y vanidoso tan alimentado hoy en las redes sociales. Narciso mira hacia el exterior, su autoestima depende del reflejo en el espejo, de la mirada ajena que alimenta su vanidad; carece de empatía y los demás solo le importan en la medida en que le inflaman el ego.

Es cierto que necesitamos que nos amen y que nos reconozcan, pero no podemos depender del espejo ajeno.

nos educan de forma diferente si somos niñas o niños para que nos acomodemos a los moldes tradicionales impuestos por el modelo binario de género. La autoestima se construye más eficazmente en los niños, mientras que en las niñas no solo no se fomenta, sino que se tiende a menoscabar; ellos interiorizan mejor el amor propio y ellas la necesidad de gustar y de volcarse en los demás. Como resultado, las mujeres, en general, son más vulnerables y, por lo tanto, viven con un mayor lastre el amor y la sexualidad