Esta es la historia de un abandono y, al mismo tiempo, de una iniciación, de una pérdida de las ilusiones y de una educación sentimental. Cuenta las vicisitudes de un personaje, pero también las de dos países, Italia y Rumanía, donde los empresarios italianos han trasladado sus fábricas por conveniencia. Y habla, pues, de la extraña Europa de hoy, que se presenta como el faro de Occidente aunque en ella la iniquidad campe por doquier.