“De joven jamás soñé con esto. Soñé con colores y que me caía, entre otras cosas”. Así de breve y conciso es el prólogo de Neil Young a sus propias memorias, y es que en un primer momento el compositor no quería escribir sobre sí mismo. Por fortuna lo hizo y el resultado es un libro que lo revela, además, como escritor norteamericano: a través de una narrativa no lineal, que usa recursos como el flujo de conciencia, Young relata su vida, su fascinación por los trenes a escala y la carpintería, su incursión en el cine y, por supuesto, su carrera musical. Un libro que debería contarse entre lo mejor de la discografía del canadiense.