Emilia es una chica que tiene mucho que decir y quizá no encuentra con quien compartirlo, a pesar de la cercana relación que tiene con su padre y sus amigas. Ella y su padre viven en México convulso que los acorrala y a Emilia la dejará en coma.
Esta novela es una montaña rusa de emociones. El asombro y la estupefacción son constantes. Los personajes son delirantes. La relación entre madres e hijas es vista desde lo descarnado de una realidad que pocas veces se dice.