El cuerpo en que nací

Todo comienza con un ojo y todo termina con el mismo ojo, de ahí Guadalupe Nettel nos cuenta su infancia: graciosa, directa y con una nostalgia.

Me encanto el libro, totalmente adictivo y con una lectura muy fácil, nuestros padres disponen de una forma en que creen correcta para criarnos pero solo es otra forma de encontrarnos con traumas y puntos de partida para nuestra vida, ser niño también es doloroso y ajeno a la libertad por más que podamos correr sin cansarnos, somos lo que nuestros padres nos dejan ser con sus cortas o sesgadas visiones.

A huevo, chismecito. Pensé que iba a estar aburrido porque ¿Qué sufrimientos puede tener alguien que vivió en Villa Olímpica cuando niña? Pero es genial y está muy bien contado, perfecto si estás buscando en tus traumas de la niñez. Ahora ya sé porque soy adicta al Lumen y a las farmacias 😂

Librazo de Guadalupe Nettel, definitivamente está en mis escritoras preferidas. Lo recomiendo mucho.

Está interesante, profundamente emocional, entretenido y me hizo reflexionar. Me gusta como escribe Guadalupe y es otra de sus obras que he disfrutado, lo recomiendo

¡Buenísimo! Una historia muy sincera, con sus pasajes tristes o negativos. Pero contada de manera muy divertida. Por las fechas que maneja, yo asumo que tengo unos seis años mas que la autora, y viví esos tiempos en la CDMX. Me trajo recuerdos buenos y malos de aquella época. El relato de su vida en Francia es muy interesante. Buscaré otros libros de ella.

Para mi no termina de amarrar, pero si me quedé con ganas de leerla otra vez

No conecté con la historia pero me encantó la forma en que la autora la cuenta. Creí que lo dejaría de leer porque la protagonista, si bien sufre por su cuerpo, es bastante privilegiada y parte de la historia transcurre en Europa (no mi tipo de historia). Sin embargo, las emociones, el sentimiento y la intimidad que transmite la autora son sumamente cautivadoras e inspiradoras.

A veces el conocer la historia de vida de una persona, la historia real, hace que puedas poner en perspectiva tu propia historia.

Si bien cae definitivamente en mucho privilegio, una de repente se lleva sorpresas y proyecciones. Me gustó.