NOTA PARA EL HOMBRE
QUE VI EN UN SUEÑO
Vi en usted la ternura que insinúan los días
cuando se les mira de cerca.
Las sombras se revelaron en su frente amarillas
como las rosas que alguien narraba hace tiempos, Updike creo.
Y en la palma de su mano reconocí la profundidad
quiromántica
de un hombre solo.
Su tacto me acuerda de un río,
no sé por qué, ni siquiera he nadado en uno.
Sus ojos, que son fractales, pueden hacer magia
y crear universos donde sea que mire.
Me gustaría volver a verlo, ¿está libre el viernes?