El turista desnudo

Porque la intimidad nace de estas repeticiones familiares, de reírse de las viejas bromas, de recordar el enojo por antiguas rencillas, de comidas compartidas bajo el mismo atardecer y de niños que escuchan el relato de sucesos que ocurrieron antes de que nacieran sus padres, de historias que se cuentan una y otra vez.

sólo mediante una vivencia intensa de relaciones personales pueden experimentarse la vida y la cultura de un pueblo en su totalidad.

Los entornos turísticos son una forma de fingir que la muerte no nos vencerá. Su ambiente es un presente eterno; parece que, en su interior, se haya conseguido ingeniosamente detener el tiempo.

La frialdad de la que es capaz la civilización es impresionante.

pocos escritores tienen una voz auténtica, y cuando alguno lo consigue, el efecto es de lo más seductor.

Un libro, el murmullo de la misma escritura, tenía aquí una intimidad romántica; era un objeto acarreado hasta un lugar que le resultaba del todo ajeno.

«Es en las selvas donde el paisaje esconde sus secretos», escribió Joseph Roth.

Es fácil decir que el mundo es un lugar extraño, pero cuanto más comprobamos lo extraño que es, más nos cabreamos.

¿Cuántas veces, en el transcurso de nuestra vida, creemos salir en busca del «otro»? Y, sin embargo, cuando lo tenemos delante sin que medie la fuerza superior de nuestra propia civilización, la impresión es brutal. Todas nuestras reacciones atávicas de miedo, inseguridad y chovinismo tribal afloran a la conciencia,

Poco a poco la civilización se aparta de mí. Estoy empezando a pensar con sencillez, ya no aborrezco a mi vecino…, más bien estoy comenzando a quererlo. Son mías todas las alegrías —humanas y animales— de una vida libre. He escapado de todo aquello que es artificial, convencional, habitual. Estoy penetrando en la verdad, en la naturaleza. Tener la certeza de una sucesión de días como este de hoy, tan libres y hermosos, me llena de paz. Evoluciono con normalidad y ya no me preocupan las vanidades fútiles.