El corpus textual que llamamos literatura mexicana es enormemente rico y puede hacer perderse a cualquiera; este libro aspira a ser una guía, compañero de viaje al que se puede recurrir cuando un rumbo incierto se vuelve ya pérdida del camino, no busca ser el único recorrido, expectativa absurda, pero tampoco a ser uno más entre el infinito abanico de opciones.