Beatriz regresa a Madrid tras pasar cuatro años estudiando en Edimburgo. En la ciudad escocesa deja a Cat, su novia, y a Ralph, con el que ha vivido un corto e intenso romance. Volver a Madrid implica regresar a su pasado, enfrentarse de nuevo a la difícil convivencia con su madre, pero sobre todo, al recuerdo de Mónica. Al recuerdo de un gran amor y una época en la que el mundo de la noche y las drogas precipitaron los acontecimientos que la hicieron marchar.