El Gran Hotel, la primera obra de la escritora chilena María Paz Rodríguez, se desarrolla en un imaginario que corresponde al de una novela pop: un hotel como los que se pueden encontrar al borde de las carreteras norteamericanas, donde una tradición literaria nos dice que podemos encontrar a gemelos como D y R, a una mujer llamada Polly; caminos interiores que evitan a la policía, un bar llamado El Olvido donde se puede trabajar sirviendo tragos y al mismo tiempo componer canciones y tocarlas en guitarra, y donde existe un detective que investiga la desaparición de una profesora con la que por las noches se acuesta.
María Paz Rodríguez hace una apuesta en El Gran Hotel por literaturizar la ficción. Cito: “Ese universo que es mi mayor obra, mi mayor personaje, mi mayor ficción”. “Porque yo quería tener algo más que contar sobre mí misma. Algo que valiera la pena y no las ganas de vivir”.