uso de la forma “-e”
Sin duda, la forma “e” es el símbolo de las disputas por un lenguaje inclusivo y es usada como acto de resistencia y subversión frente a la normatividad establecida. Para algunos grupos la “-e” representa una forma neutra, usada en la modalidad oral y escrita —“niñes”, “todes”, “compañeres”— y que provee de materialidad para la comunicación oral que los signos gráficos @, x, - no poseen. Para otros, en cambio, la forma “-e” amplía el paradigma del género gramatical y propone una forma que representa a los géneros que no quedan representados en lo masculino y lo femenino. Por lo tanto, estos grupos proponen triplicar la denominación de las personas: