Desde que a los doce años abandonara la aldea de Anatolia donde nació, Mevlut Karatas no hace más que fantasear sobre su vida. Instalado en Estambul, desde el primer momento se siente cautivado por la ciudad vieja, sometida a constantes transformaciones, y por la nueva metrópoli que se abre paso rápidamente en su lugar. Y es allí, en “el centro del mundo”, donde le veremos crecer, enamorarse y ganarse la vida como vendedor callejero de boza, una bebida tradicional turca. Pasa el tiempo y él sueña con prosperar, pero el azar parece conspirar en su contra. Y mientras todos a su alrededor logran hacer fortuna, él sigue deambulando de noche por los callejones de la ciudad, subsistiendo a base de míseros trabajillos que no conducen a nada y con esa sensación extraña que le hace sentirse diferente a los demás. Hará falta un nuevo giro del destino para que Mevlut comprenda finalmente qué es lo que lleva toda la vida anhelando.