La vida familiar es una dosis intensa de Polleri, que desconcierta por su lucidez delirante, en estado puro, sin edulcorar. En esta colección de cuentos el autor ejerce una extraña forma de violencia contra el lector, una agresión que lo emparenta con la retorcida manera en que sus personajes entienden, por ejemplo, que abrirle la cabeza con un hacha a alguien es una expresión de amor a la humanidad. De respeto. Un intento de aprehensión de la Dignidad Humana.
Las relaciones familiares están en la mira, pero no son lo único que es atacado. Lo sórdido, lo terrible, la crudeza de la realidad más mezquina se disparan también como una granada de fragmentación; la metralla podrida de las bajezas humanas se expande e infecta todo el universo de este libro y aun más allá. Polleri es un arma de destrucción masiva.