De camino a tu trabajo, ¿cuántas personas ignoras por al menos un momento, sean aquellos que pasas en la calle, los que se sientan contigo en el transporte, o los están junto a ti en un ascensor? Saluda al menos a una de esas personas con un “buenos días” y ofrécele un elogio (“que bonito abrigo. La tela se ve cómoda”)