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Luis Jorge Boone

Cavernas

  • Rafael Ramosцитирует3 дня назад
    El hombre casi terminaba de bajar el cerro, y sólo entonces el sol pareció desistir de su tenaz dominio del mediodía. Desde temprano el astro había permanecido con exactitud milimétrica sobre su cabeza, calentándole las ideas, socavándole la voluntad, derritiendo su resistencia. Enormes piedras construían la bajada, los árboles y los matorrales de espinas emparejaban las paredes de su laberinto. Pero logró mantenerse en pie, reconstruirse; como una vela consumida que hay que moldear, darle una verticalidad aceptable para que cumpla su propósito de guiar a través de la noche.
  • Rafael Ramosцитирует23 дня назад
    Yo entiendo que los caminos de Dios, de tan extraños, semejan a veces vertiginosos desfiladeros.
  • Rafael Ramosцитирует23 дня назад
    Dudo legítimamente que un oficinista pueda amar su trabajo: de niño nadie sueña con contestar teléfonos, archivar memorándums al ritmo patológico que se producen, asistir a juntas y echarse la culpa de los errores de su jefe. Pero hay oficios –mejor: destinos– a los que imagino imposible llegar a menos que se ame lo que éstos entrañan. Aunque sea de una forma torcida. Todo policía es un terrorista disfrazado; todo abogado lleva dentro un anarquista que espera saltarse la ley; todo deportista es una bestia salvaje que busca enterrar su raciocinio. Entre los pliegues del cerebro de todo Cirujano se oculta una vena de locura: sólo un perturbado puede dedicar sus horas más laboriosas a rasgarle a un ser humano la piel y las entrañas.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Debería existir un término para esa condición irónica: miedo primitivo a las armas que estamos lo suficientemente avanzados para diseñar y construir.
    Don DeLillo
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Podríamos rezar en el catecismo por ella, por su alma que está en el cielo, que vive entre relámpagos y el viento helado del norte, que no tiene una sola nube para esconderse del sol que todo lo quema. ¿Algún día podré decirle al padre que es en el cielo donde está el fuego que no se apaga, y no en el infierno? Los demonios deben tener frío. Dejan ciegos a los niños imprudentes porque su aliento les congela los ojos.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Mi madre tuvo fiebre una semana y después murió. Mi padre la cubría con sábanas mojadas. Ella se quejaba. Lloraba. La última imagen que tengo de ella es su cara empapada de sudor, sus labios secos, sus ojos como apagados, ella que con sólo mirarme me convencía de que el mundo entero era un buen lugar y que valía la pena sobreponerse a cualquier cosa.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Dicen que está en el cielo, pero me gusta más imaginarla en su ataúd, bajo tierra, descansando de su enfermedad. Nadie golpea la madera que la protege. Todo es silencio allá abajo. Dormida. Nunca va a despertar.
    Si ella fuera como el aire, si viviera arriba y por encima del mundo, vería demasiadas cosas que la pondrían triste, se mojaría con la lluvia, los relámpagos la incendiarían, se volvería a morir. El atardecer sería su cabello ardiendo como el sol herido, el camino de oscuridad que dejaría en su huida.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Supe lo que debía hacer. Intenté no temblar, no decirle que estaba desesperado por ver a la bella mujer del jardín interior, que si mirarla me causaba una honda tristeza, no verla me convertía en la piltrafa humana que era ya.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Hace muchísimos años, antes de que yo pudiera darme cuenta de que pasaría mi vida aquí, alguien me contó una historia que sucedió en el departamento del fondo. Ahí vivía un hombre. Un día empezó a hablar de mujeres tan bellas que tan sólo contemplarlas entrañaba dolor. Alguien dijo que enloqueció. No sé quién: las sombras cubren siempre los rostros y nos mantienen aislados de los demás.
  • Rafael Ramosцитируетв прошлом месяце
    Esparcidas por la habitación, las partituras tapizaban la casa. Me senté en el piso a seguir estudiándolas. Iba de una a otra haciendo anotaciones, buscando penetrar el misterio de los sonidos que se alzaban silenciosos hasta erigir palacios en mi mente.
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