El teletrabajo no se puede gestionar como una alternativa motivacional ni como una forma de recompensa. El smart working es una filosofía de gestión en la que la organización y el empleado acuerdan formas flexibles de trabajo para conseguir los mejores resultados poniendo el foco en el rendimiento y el bienestar de todas las partes. Este nuevo modelo de trabajo híbrido tiene que considerar y replantear aspectos clave de la empresa como la cultura, la estructura organizativa, el trabajo por procesos y proyectos, el liderazgo de los equipos y la manera de gestionar el tiempo de los profesionales.