Mariana Enriquez es una genia. Concisa y tenebrosa.
Una profesora nos habló de este libro porque lo leyeron en el club de lectura al que pertenece. Nos admitió que no le interesaba mucho al principio porque nunca había leído nada de horror y cuando escuchaba esa palabra pensaba en Stephen King, quién no le emociona mucho. Nos contó la sorpresa que se llevó con este libro, pero más sorpresa los comentarios de algunos de sus compañeros que decían "ni da miedo, me imaginaba algo peor", ¿hay algo peor que la imagen de un niño degollado? Comentarios como este son la prueba de que cada vez las situaciones horribles empiezan a parecernos normales y qué putada que así sea :c
Considero que es una lectura que se tiene que hacer a consciencia, poniéndose en los zapatos de los personajes. A mí me saco buenos sustos y unas cuántas pesadillas.
Pensé que no volvería a sentir lo que sentí cuando vi Veneno para las hadas