marchan a la puesta de sol, y el octavo es el custodio de la trama. Había muy pocas variaciones. Yo había empezado a creer que un argumento era una presunción como cualquier otra. Sin embargo, sólo has de irte a la cama con un Seconal y un thriller, corriendo hacia su confrontación, para que quede claro que ése no es el caso. La trama en la que todo converge, como en Cita en Samarra, como en las historias de amor, como en cualquier historia donde no puede faltarse a una cita. La trama no tan común donde todo se separa, se desintegra, estalla. La trama en la que una historia sigue la pista de otra, como en los thrillers, persecuciones. La trama de historias paralelas. El suspense, que tiene al tiempo como un obstáculo a una resolución en el futuro. Quizá incluso hay historias como el solitario o la canasta; se baraja, se reparten las cartas y sale o no sale. O la baraja cae al suelo. O una canción country, un cuarteto, un desfile, la bandera –todas las cosas para las