Abraham Lincoln su liderazgo

Se le dispensaron todos los cuidados, pero, al fin y a la postre, resultaron inútiles y, la mañana del 1 de febrero de 1850, Eddie falleció.

Nos recuerdan por encima de todo que la fragilidad humana no es obstáculo para el bien, que las desgracias no deben amilanarnos, que el mal no tiene por qué emerger como vencedor si nuestra fe, como la de Lincoln, está depositada en el Dios de la Biblia.

era una obligación moral de todo el género humano ponerse en pie para defender resueltamente aquellos derechos inalienables conferidos por el Creador.

reconociendo humildemente que no había que pretender tener a Dios de parte de uno, sino más bien buscar dónde se encuentra Dios para colocarse a Su lado.

Con malicia hacia nadie; con caridad hacia todos; con firmeza en lo justo, según Dios nos conceda ver lo justo, prosigamos para concluir la labor en la que nos hallamos; para vendar las heridas de la nación; para cuidar a aquel que haya sufrido la batalla, y a su viuda y a su huérfano, para hacer todo lo que pueda acabar y consumar una paz justa y perdurable entre nosotros mismos y con todas las naciones.

«Los juicios del Señor indudablemente son verdaderos y justos».16

No podemos tener un gobierno libre sin elecciones; y si la rebelión pudiera forzarnos a pasar por alto o posponer una elección nacional, podría perfectamente pretender que ya nos ha conquistado y arruinado ...
Pero la elección, con su lucha incidental e indeseable, nos ha hecho bien también. Ha demostrado que un gobierno del pueblo puede celebrar una elección general en medio de una gran guerra civil ... Muestra también lo sólidos y lo fuertes que somos.

... nada que tuviera la impronta de la imagen y semejanza divinas fue enviado al mundo para ser pisoteado, y degradado y embrutecido por sus compañeros ...

Protesto contra la falsa lógica que supone que porque yo no quiero a una mujer negra en calidad de esclava, necesariamente tengo que quererla en calidad de esposa.

Si el negro es un hombre, mi antigua fe me enseña que «todos los hombres son iguales» y que no puede existir ningún derecho moral para que un hombre convierta a otro en esclavo.6