—La realidad no es la atmósfera más agradable, teniente, pero nos gusta creer que fuimos diseñados para ella. Es un diseño bastante bueno, del tipo que un ingeniero respeta. Si involucramos una obsesión, la realidad no puede tolerarla. Algo se descompone; si la realidad se va, esa gran pieza de ingeniería se queda sin nada con qué operar. Nada con lo que haya sido diseñada para operar. Así que funciona mal. Así que expulse esa obsesión; empiece a funcionar de la manera que fue diseñado para funcionar.