La fe de Alfonso Reyes en la cultura americana como territorio legítimo tiene en su teoría literaria una guía del diálogo fundador y renovador. Su obra nos liberó de las interpretaciones traumáticas de la cultura hispanoamericana y nos demostró que somos capaces de venir de todas partes, con inteligencia e ironía, gracias a la saga literaria de vivir aquí todos los tiempos.