es
Books
J.I. Packer

El evangelismo y la soberanía de Dios

  • Mishu Herreraцитирует2 года назад
    nunca debemos olvidar que es Dios quien salva. Es Dios quien trae los hombres a escuchar el evangelio, y es Él quien los lleva a la fe en Cristo. Nuestra obra evangelística es el instrumento de la obra salvadora de Dios; el poder de salvar no se encuentra en el instrumento, sino en la mano que utiliza el instrumento. Nunca debemos olvidar eso. Pues si olvidamos que es Dios quien da resultados cuando se proclama el evangelio, intentaremos dar resultados por nuestro propio esfuerzo.
  • guecrisцитирует3 года назад
    el motivo de nuestras oraciones.
  • guecrisцитирует3 года назад
    Comenzamos sugiriendo que la práctica de la oración es una prueba positiva de la soberanía de Dios. Y terminamos sugiriendo que la fe en la soberanía de Dios
  • guecrisцитирует3 года назад
    Hemos de predicar porque sin conocimiento del evangelio ningún hombre será salvo. Hemos de orar porque sólo la soberanía del Espíritu Santo en nosotros y en los corazones del hombre puede dar eficacia a nuestra predicación, y Dios no manda a Su Espíritu donde no hay oración.
  • guecrisцитирует3 года назад
    Nunca se nos ha prometido resultados rápidos. El evangelismo es una tarea en la cual no se espera resultados rápidos.
  • guecrisцитирует3 года назад
    Nosotros no podemos hacer que los pecadores se arrepientan y crean en Jesús, sino es Dios quien obra fe y arrepentimiento en el corazón del hombre por medio de Su Espíritu.
  • guecrisцитирует3 года назад
    Como una obra humana, la evangelización es imposible
  • guecrisцитирует3 года назад
    La soberanía de Dios en su gracia nos da la única esperanza de tener éxito en la evangelización.
  • guecrisцитирует3 года назад
    vemos que hay dos barreras a la evangelización eficaz: la primera es el impulso natural e irresistible del hombre de oponerse a Dios, y la segunda es el pastoreo asiduo de Satanás a los hombres en sus pecados y en su desobediencia.
  • guecrisцитирует3 года назад
    La creencia de que Dios es soberano en su gracia no afecta la responsabilidad del pecador por su respuesta.
fb2epub
Перетащите файлы сюда, не более 5 за один раз