La importancia que empezó a cobrar el fenómeno religioso a inicios del siglo XXI incita a preguntarse cuál es el sentido y el
devenir de lo sagrado, ámbito de lo humano silenciado en el mundo “desencantado” del Occidente moderno, según la célebre fórmula de Max Weber de los albores del siglo XX.
Este libro intenta responder a esa interrogante desde la perspectiva de la poesía, histórica hermana y enemiga de la religión. La poesía, como recuerda Octavio Paz, es también experiencia de nuestra “otredad” constitutiva y «contacto con esos vastos territorios de la realidad que se rehúsan a la medida y a la cantidad”.
Esta lectura de la poesía de César Vallejo, Jorge Eduardo Eielson y Blanca Varela nos permite entender la ecuación que asocia a la modernidad poética con el hundimiento de lo divino, en un contexto particular que toma en cuenta lo específico de lo peruano y lo latinoamericano por su condición periférica. En ese proceso se hace palpable la relación entre la poesía y lo sagrado, ese «más allá" del lenguaje.