Un libro que dirige su atanción a los problemas de como educar a los niños y estimula replantearse las relaciones interfamiliares. Pocos ámbitos han experimentado tantos cambios como el de la familia. Los modelos del pasado se han agotado y, frente a los nuevos modelos de sociedad y de familia, ya no podemos criar a los niños como lo hacían nuestros padres. No hay recetas mágicas, pero sí existen principios básicos, como la reciprocidad, la integridad, la autenticidad o la responsabilidad, que deben ayudarnos a formar personas con los suficientes recursos para hacer frente a los problemas. Planteando la educación como un proceso de aprendizaje para ambas partes, Jesper Juul establece una clara diferenciación entre lo que los niños quieren y lo que necesitan. Al caer con demasiada frecuencia en la satisfacción de lo que los niños exigen, las familias muchas veces suelen colmar a sus hijos con muchas cosas sin tener en cuenta que no les están dando lo que más necesitan: un sistema de valores fuerte que les permita hacer frente a los problemas que les planteará la vida.