Tras el éxito de Viajes a la belleza del espíritu, apetecida por maestros y bibliotecas escolares, en la que Roberto Matamala presenta cuatro obras de teatro destinadas a la difusión de la ciencia, el autor retorna a la publicación de textos dramáticos compilando sus inéditas adaptaciones de la dramaturgia clásica. Con su profundo sentido del humor —que no deja espacio a la vergüenza— este recorrido comienza en el siglo XV y llega hasta inicios del s. XX con alegres y simpáticas creaciones de Lope de Rueda, Moliére, Shakespeare y Chejov, adaptadas al «chileno», que invitan a poner en tablas su representación sin más que el entusiasmo y las ganas de los interesados. Desde obras de apariencia simple a otras más complejas, el autor viaja finalmente a los clásicos del siglo V a. de C. Las tragedias griegas Antígona de Sófocles y Las Bacantes de Eurípides resultan magistralmente adaptadas, con todos sus matices, en la simpleza del lenguaje que arduamente logra el dramaturgo chileno. Tal cual sus anteriores publicaciones, Clásicos sin vergüenzas puede leerse gozosamente como si fuese una novela o útilmente ser exprimido en la escena o la educación.