Esta historia se desarrolla en la cabina de un avión, una mujer, que está feliz porque el asiento de al lado no está ocupado, se decepciona cuando ve entrar a Juan Diego —un niño de 10 años recomendado a la azafata— justo cuando van a cerrar la puerta del avión. Durante el vuelo ocurre una fuerte turbulencia que hará que los dos personajes se acerquen y compartan sus historias de vida: hablarán sobre la familia, el amor, el divorcio, el secuestro… y los aviones (que son la pasión de Juan Diego). Todo en una conversación de igual a igual, como pueden ser las conversaciones profundas entre niños y adultos cuando se dan la oportunidad.