En un mundo con un velo tan característico a los occidentales nos resulta un poco extraño el reaccionar de estas mujeres,;sin embargo, nadie mejor que el escritor por excelencia de la vida galante (por llamerle de alguna manera) del gran Nagai Kafu, una historia con giros poco previsibles y un final inesperado... Me hubiese gustado saber un poco más del furo de Komayo, pero finalizó conque rivalidad entre mujeres orientales u occidentales siempre es una frenta que se cobra tarde o temprano.