Estás en una ciudad desconocida, esperando tu tren. Tenés varias horas, así que salís a caminar por las calles. Solo llevás un bolso pequeño y tu cámara de fotos. Hace frío. Te encontrás con alguien y te ponés a conversar. El aire está raro, pero te dejás llevar. Se hace de noche. Hay algo a punto de ocurrir, no hace falta ninguna capacidad extrasensorial para saberlo. Los dados están echados. Llegues adonde llegues, siempre terminás conociendo tu futuro.