Como bien dice Gérard de Cortanze en la introducción del libro: «En realidad, Frida Kahlo es una de las artistas más enigmáticas que existen, una de las más íntimas, como abrasada por sus opciones políticas, su dolor físico, su amor por Diego. Esto es lo que interesa de su pintura. Pero más allá de lo que Carlos Fuentes llama sus «treinta y nueve años de sufrimiento», tenemos a una mujer que crea un universo pictórico vigoroso y colorido, cuyo grito adopta una forma emocional y visible. Es ese viaje hacia un mundo impresionante, muy particular, muy vivo, único en la historia de la pintura, lo que he tratado de describir en este libro, que no es ni un ensayo ni una biografía en el sentido clásico de la palabra, sino más bien un recorrido por los meandros de una obra y una vida, que descubrimos detrás de una falsificación en la que el creador siempre nos abre su diario auténtico. En algunos bocetos y en algunas pinturas de Frida Kahlo aparece un verde a veces profundo, un amarillo…