Un joven se encamina a Londres para aceptar una herencia paterna que, según estipula el testamento, tan solo podrá disfrutar si se casa con Bella Wilfer, una hermosa muchacha a la que nunca ha conocido. Poco antes, sin embargo, aparece flotando en el Támesis un cadáver que la policía identifica con el joven heredero. Es el principio de una onda que afectará a toda la sociedad londinense.
En Nuestro amigo común, Dickens demostró todo el vigor de su prosa y de su imaginación en un deslumbrante ejercicio de virtuosismo literario.
«Los comienzos de las novelas de Dickens suelen ser memorables, pero ninguno supera el primer capítulo de Nuestro amigo común, penúltima novela que escribió y última que terminó. Llevados por la barca del pescador de cadáveres, nos parece entrar en el reverso del mundo». (ITALO CALVINO).