Para un hombre, el ingreso en la sórdida y decadente prisión de Falconer significa no solo perder la libertad, sino también la identidad, la dignidad, la capacidad de decisión y prácticamente cualquier otro rasgo de humanidad que hubiera poseído como miembro de una sociedad que ha dejado atrás. Esa es la transformación a la que se ve sometido Ezekiel Farragut, un profesor drogadicto que ha sido condenado por matar a su hermano. La lucha del preso por emerger de sus cenizas y reconstruir su esencia humana, sentimental y moral es lo que nos cuenta John Cheever en la cruda y a la vez simbólica Falconer, contundente novela que se encuentra entre los trabajos más brillantes y valientes del autor estadounidense.