¿De dónde surge la historia que se cuenta en una novela? ¿Cómo se pergeña pedazos de realidad el escritor? ¿Con qué parámetros se crea el personaje de una obra de ficción? ¿Qué tanto se parece un personaje a un hombre cualquiera? ¿Por qué es tan necesaria la participación del narrador en todo relato novelado? ¿Bajo qué personas gramaticales puede manifestarse ese narrador? Estas cuantas preguntas son el pretexto para ofrecer otras tantas respuestas en este texto.