desde principios de este siglo [XX], muchos psicólogos comenzaron a apartarse de las preocupaciones especulativas por las sustancias y los procesos intangibles heredados de la teología, para acercarse a los problemas que plantean las escuelas, la ocupaciones y las interrelaciones sociales y personales. A consecuencia de ello, la psicología pasó a ocupar un lugar entre las profesiones de servicio, mediante el desarrollo y empleo de tests, mediciones, técnicas de orientación y auxiliares de las ingenierías (Kantor, 1969/1990, p. 597).