Diagnóstico con intervenciones terapeuticas

«(…) una de las funciones principales del terapeuta es ayudar al paciente a verbalizar y a convertir en pensamientos conscientes los sentimientos inconscientes y las fantasías de deseo que le preocupan (…)» (Rosenfeld 1990: 46).

cómo integrar en una psicoterapia breve lo manifiesto con lo latente en un breve plazo?

algo que tenemos que mirar juntas es su capacidad de valorarse, de amarse a sí misma…».

La historia clínica del doctor Carlos Alberto Seguín

Adicionalmente, el paciente encuentra que lo que él verbaliza y actúa puede ser comprendido por el terapeuta, es decir, que sus proyecciones no destruyen al otro, sino que pueden ser pensadas y elaboradas.

Además, permiten al paciente ubicar su situación también como una oportunidad de elaboración de sus propios aspectos, más allá del alivio sintomático.

el diagnóstico, la historia clínica detallada y minuciosa tiene un efecto particularmente catártico, no solamente a partir de la verbalización y expresividad, sino especialmente a partir de la actitud que señalamos líneas arriba en el entrevistador, a saber, acogida y receptividad.

mayor encuentro consigo mismo, a través del vínculo terapéutico de largo aliento.

El terapeuta, más aún si se está iniciando en esta tarea, tiene la posibilidad con este diseño de aprovechar, con efectividad terapéutica y no solo evaluativa, el tiempo de trabajo con el paciente, desarrollar su identidad de psicoterapeuta, disminuir su frustración al reducirse las deserciones, implementar sus observaciones y elaborar la intensidad del vínculo en términos de transferencia-contratransferencia en provecho del paciente y de él mismo,

Pero sobre todo, se requiere que el terapeuta transmita con énfasis la convicción de que se puede recuperar en alguna medida la capacidad de pensar y dialogar (…) y así calmarse y recuperarse de la situación crítica»