Y ocurrió el fin del mundo… pero solo en el fin del mundo.
Santiago de Chile, verano, dos años después del fin de la pandemia del COVID-19.
Un corte de luz desconecta todas las redes y artefactos eléctricos de la Región Metropolitana. Nada funciona, ni teléfonos, ni autos, ni máquinas. Y cada noche, a las diez en punto, comienza a caer una extraña nieve que viene de ninguna parte y que cubre la ciudad a pesar del calor. El gobierno emite explicaciones sin sentido y declara estado de sitio, prohibiendo la entrada y la salida de Santiago.
En medio del caos, Alberto decide sacar a su familia de la ciudad usando los viejos túneles del metro. Lo que Alberto ignora es que esta decisión lo enfrentará cara a cara con la espantosa verdad de lo que sucede. A veces es mejor vivir en una mentira, aunque esa mentira sea el propio Apocalipsis."