El padre Galen Murphy ya no quiere ser sacerdote.
Nacido en el poder y el privilegio, a los dieciocho años desafió al destino y renunció a su derecho de nacimiento. Durante veinticuatro años, ha seguido su vocación y ha servido a Dios, viviendo una vida de pobreza y castidad.
Cuando una trágica pérdida le hace cuestionarse su fe, y un par de ojos castaños oscuros le hacen replantearse sus decisiones, Galen se quita el alzacuellos y elige una vida corriente.
Birdie García es demasiado joven para un hombre de cuarenta y dos años. Es mojigata y devota, con un alma vieja, un corazón reverente y una cabeza sensata sobre los hombros. No es ajena al trabajo duro y su misión es ayudar a poner en marcha el negocio de casamenteros de su querida hermana… ¡hasta que su nuevo cliente resulta ser un sacerdote!
Ella no podría ayudar a uno de los ungidos de Dios a alejarse de su vocación. Es algo prohibido, sacrílego y seguramente le valdrá un billete de primera clase al infierno.
Entonces, ¿por qué fantasea con el hombre más dulce que jamás ha conocido? ¿Por qué sueña con su apuesto rostro, su majestuosa figura y los ojos azules como tormentas que tienen el poder de ver dentro de su alma?
Galen sabe que ha encontrado a la chica de sus sueños. A pesar de la reticencia de Birdie y de la diferencia de edad de veintitrés años, no se dejará disuadir. Es un hombre paciente con años de práctica en la abnegación. ¿Cómo de difíciles pueden ser unos meses de tensión sexual latente, lujuria incipiente y deseo explosivo? Descúbrelo.
Este tórrido romance incluye una persecución del gato y el ratón entre dos vírgenes que se enamoran perdidamente y rápidamente descubren el lado travieso de la felicidad conyugal. Incluye referencias religiosas que te harán reír a carcajadas, pero que pueden ofender a los débiles de corazón. Estás avisado.