En este tercer volumen de la serie de los Sermones parroquiales se incluyen veinticinco sermones predicados en la iglesia de Saint Mary's en Oxford. El genio humano y cristiano de Newman, que ya era una autoridad no exenta de polémica en Inglaterra, vuelve a brillar en ellos con toda lucidez. Con un conocimiento de la Escritura poco común, el autor, todavía anglicano, describe con belleza y en toda su riqueza a la Iglesia como instrumento de salvación, como continuidad de Cristo en la historia a través de los sacramentos. Unas convicciones defendidas con fuerza y que llevarían a Newman, en no mucho tiempo, a la conversión al catolicismo.