El volumen pone de relieve el impacto de los microformatos literarios y artísticos en nuestro pensamiento, analizando aquellas manifestaciones que a diario buscan adiestrarnos en la lectura de textos ultracortos, cuyas dimensiones van del pajarillo de Twitter al programático dinosaurio. Reúne veinte trabajos, firmados por renombrados nanofilólogos, cuyas reflexiones teóricas sobre la clasificación del género y poética ponen de manifiesto una cosmovisión discontinua de la realidad así como nuevas vías de sensibilidad en la convivencia (y supervivencia) cotidiana, social y política. Otras diez contribuciones creativas, procedentes de las letras (por ejemplo, de la tuiteratura) y demás artes (una micropartitura para canto, grafiti, cómic o micrometraje audiovisual), subrayan asimismo el brío de las formas breves.