Cuento corto pero "sustancioso". El altruismo del ruiseñor nos deja una enseñanza clara: el sacrificio.
Porque el amor es más sabio que la filosofía, aunque ésta sea sabia; más fuerte que el poder, por más fuerte que éste sea. Sus alas son color de fuego y su cuerpo color de llamas; sus labios son dulces como la miel y su hálito es como el incienso.
Tan hermoso y triste. Sólo como Oscar Wilde sabe.
Realmente el amor es algo maravilloso: es más bello que las esmeraldas y más raro que los finos ópalos. Perlas y rubíes no pueden pagarlo porque no se halla expuesto en el mercado.
Que sacrifico de parte del ruiseñor
Hacía tiempo que no leía a Wilde. Con cuánta belleza se puede retratar la desdicha. Me dejó muy triste, muy triste.
Triste
Me encantó.
Desde siempre ha sido mi cuento preferido, delicado y hermoso de principio a fin. El amor, los sacrificios a los que estamos dispuestos, el egoísmo, y todos sus matices.
El amor solo es una simple inexistencia humana de satisfacción. Los sentimientos cambiantes por material costoso, es el llamamiento a un amor quebrante e ignorante.