En las diversas áreas de la vida, es más importante subir por la escalera correcta para llegar al último peldaño; sobre todo si por intentar llegar cuanto antes hasta arriba nos equivocamos de escalera.
Otro rasgo que analizan los autores es la creciente dificultad, de forma especial entre los 25 y los 35 años, para tomar decisiones que entrañan compromisos. Ni precipitación ni pasividad. Ejercer la libertad exige muchas veces decidir; retrasarla más de lo conveniente puede llevar a llegar con retraso a algunas fases de la vida y quizá vivir en una inmadurez que se debiera haber superado.
Este libro está pensando para ayudar a decidir y evitar el síndrome de Peter Pan.